Te imagino
Subiendo unas escaleras,
Que crujen siempre
Por los mismos lugares.
Llegando tras el infame trabajo,
Bien entrada la noche.
Encontrando una casa vacía,
Desordenada.
Sin nadie a quién desesperadamente
Hacerle el amor.
Con el amargo sabor a pérdida
En los labios.
Y un brillo en la piel a deserción.
Con la soledad
En el frío tacto.
Y un puñado de quejas mudas.
Preguntándote
¿Dónde estabas hace quince años?
Antonio Palacios
Y un brillo en la piel a deserción
ResponderEliminar(eso ¿dónde estaba?...)